¿Cómo es posible que la confianza cueste tanto conseguirla y sea tan fácil perderla? ¿Cómo podemos confiar y sentirnos cómodos con unas personas y con otras no, aunque no nos hayan hecho nada malo para no confiar?
La confianza es una parte muy importante para nuestras relaciones y está directamente relacionada con nuestra intimidad. La intimidad, descrita por varios clientes, se puede definir de muchas maneras:
- Siento intimidad cuando puedo ser yo misma con la otra persona.
- Siento intimidad cuando puedo estar, sin hacer nada más, con el otro. Es comodidad con la presencia.
- Hay intimidad cuando me pueden cuidar y no me juzgan cuando les cuento algo mío.
- No sé lo que es la intimidad, pero la siento cuando tengo confianza con alguien.
- Intimidad es cuando puedo contar lo que se me viene a la cabeza sin preocupación de lo que vaya a pensar el otro.
- La intimidad es mi mundillo emocional, lo que me define, caracteriza y me mueve. Es lo que soy, y puedo mostrárselo a otros.
- La intimidad es algo que no se gestionar, asique tampoco puedo definirla, supongo que será lo que soy yo en mi interior y lo que tengo con otras personas
- Intimidad es poder hacer el tonto y el ridículo sin sentirme tonta o ridícula.
- Intimidad es ser y mostrarte vulnerable sabiendo que me van a cuidar.
- La intimidad es estar agusto con el otro, ¿no?
Aquí vemos algunas formas de describirlas, pero no cabe duda de que ambos conceptos están relacionados.
Para entender esto mejor, desde el Centro de Psicología Mte trabajamos con los distintos niveles de intimidad (o lo que llamamos también “átomo social”) que tiene la persona en sus relaciones sociales, para poder comprender en qué nivel están las personas de su alrededor, dónde siente que tiene más dificultades para relacionarse, cómo son sus relaciones, si están bien situadas las personas de su entorno, o si se necesitan realizar cambios…
¿Alguna vez te has planteado cómo son tus relaciones o qué lugar ocupan en tu intimidad? ¿Alguna vez te has planteado si, para ellas, sería igual contigo? ¿Has pensado en cómo es tu manejo de la confianza en los distintos entornos, y qué dificultades se te plantean? O incluso, ¿has pensado alguna vez sobre tu manejo de tu información, los limites que pones con tu intimidad?
Muchas veces, al realizar este “átomo social” o niveles de intimidad vemos que incluimos a personas con las que no hay feeling o congruencia entre el nivel de intimidad y la confianza que depositamos en esa relación, por lo que plantearnos estas preguntas y ver cómo estoy en mis relaciones sociales son cuestiones que pueden promover mayor claridad en tus relaciones y en tu forma de relacionarte con los demás. Conocer tu intimidad y tu manejo te ayudará a establecer relaciones más sanas, de autocuidado.